Fernando Berrocal, periodista.
Lo dijimos en tres columnas en DIARIO EXTRA: Maduro, Diosdado, Padrino, los hermanos Rodríguez, Tareck y el generalato no entregarían el “poder político” y consumarían un descarado fraude electoral en Venezuela, por tres razones:
1.- Han utilizado el “poder político” para robar a manos llenas, como ninguna otra dictadura en América Latina. De la empresa petrolera PDVSA se han robado la increíble suma de más de US$100.000 millones.
Solo el grupo liderado por el vicepresidente Al Aisaimi, en época de Chávez, según los acusó el mismo Maduro, se robó US$25.000 millones y, a Rafael Ramírez, otra joyita que hasta fue embajador plenipotenciario en la ONU, le encontraron US$ 2.500 millones en Andorra.
Diosdado Cabello, el segundo de Maduro y hoy a cargo de la represión y la Seguridad del Estado, pasó de simple teniente militar a multimillonario. ¿Cuánto no habrán robado Chávez, Maduro y sus familias?
2.- El general Padrino López, actual ministro de la Defensa, es el jefe del “cartel de los soles”, aliado de los capos colombianos del narcotráfico que han transformado el territorio venezolano en refugio y tanto centro de acopio como de distribución aérea de cocaína hacia los países de tránsito y consumo en Centroamérica y el Caribe, desde aeropuertos clandestinos protegidos por las Fuerzas de Defensa Bolivarianas.
La cúpula militar de un enorme generalato de más de 2.000 generales está mayoritariamente corrompida y aliada con el narcotráfico internacional y han transformado a Venezuela en un narcoestado.
3.- Desde que Fidel Castro envió a Venezuela hace unos 20 años al fallecido Ramiro Valdez, uno de los viejos comandantes de la Sierra Maestra, la Escuela Militar de lo que entonces era el Ejercito Nacional de Venezuela está en manos de instructores militares cubanos y, en el presente, más de 4.000 cubanos (especialistas G-2 en seguridad e inteligencia) controlan sobre funcionarios civiles venezolanos, las notarías públicas, las aduanas, los aeropuertos y los puertos.
El tema no es solo el comunismo que se acabó en Rusia y la influencia de Irán y los grupos terroristas árabes, porque China no baila directamente en esta crisis regional: su estrategia mundial es tecnológica, económica y comercial y no están para jugársela en estas trágicas historias y alianzas políticas y militares del realismo mágico latinoamericano. Venezuela y su petróleo son un “tema geopolítico” de sobrevivencia para Cuba. Ese es el dato.
Esta es la pura y absoluta verdad de la Venezuela del dictador Maduro. Eso solo se acaba con un enorme, franco y decidido repudio internacional contra esa dictadura y una histórica, generalizada, heroica y valiente rebelión del pueblo venezolano exigiendo democracia. María Corina Machado tiene toda la razón.
¡Gloria al bravo pueblo! Solidaridad y apoyo a la libertad de Venezuela.
