Fernando Fernández, Revista Visión CR.
Santa Claus o San Nocolás es el protagonista de estas fechas decembrinas pero lo que muchos no saben es que no siempre tuvo el aspecto de un anciano bonachón vestido de rojo. Los más escépticos con estas fechas culpan a Coca-Cola y creen que su vestimenta surgió de un invento publicitario de la marca. Pero, ¿cuál es su verdadera historia?
Pero sus orígenes se remontan al siglo IV, con San Nicolás de Bari. Este santo fue obispo de Mira, en la actual Turquía, y la tradición cuenta que defendió la reputación de tres doncellas, a las que concedió dotes para que pudieran contraer matrimonio: durante la noche, arrojó tres bolsitas con monedas de oro en el interior de su casa.
También se dice que devolvió la vida a tres niños, a quienes un malvado carnicero había asesinado y puesto en salazón. Así, se convirtió en protector de la infancia y, en su celebración, se comenzó a dar regalos a los niños.
Según explica Fermín Labarga, profesor del Departamento de Teología Histórica de la Iglesia de la Universidad de Navarra (norte de España), el origen de la figura actual de Papá Noel se remonta a 1809, cuando el escritor estadounidense Washington Irving escribió la sátira «Historia de Nueva York», en la que aparece, como tradición de origen holandés, la figura de un San Nicolás que deja regalos a los niños en los calcetines colgados junto a la chimenea.
En 1823, el poeta Clement Clarke Moore publicó un cuento llamado «Una visita de San Nicolás», donde reelaboró el personaje de Irving. E, inspirado en él, el dibujante sueco Thomas Nast realizó en 1863 su versión en cómic para el semanario «Harper’s Weekly» titulada «Merry Old Santa Claus» y publicada en 1881.
Aquí es donde, por vez primera, explica Labarga, «el San Nicolás del cuento adquiere la fisonomía de Papá Noel: un viejo gordo y barbudo, mezcla de obispo y gnomo».
Es cierto que Coca-Cola encargó en 1931 al pintor Haddom Sundblom renovar la imagen de Papá Noel para usarla en la publicidad de su marca, convirtiéndose este diseño en uno de los más míticos del personaje navideño.
Pero, dado que el dibujante Nast fue el primero en representar a Papá Noel en color rojo y blanco más de 50 años antes que la marca de bebidas, es erróneo afirmar que la célebre imagen actual de Papá Noel fuera creada por la marca de refrescos.
Repasemos entonces. El primer traje de Santa Claus no siempre fue el icónico atuendo rojo con blanco que conocemos hoy. A lo largo de la historia, la imagen de Santa Claus ha evolucionado desde diversas tradiciones:
- San Nicolás: La figura original en la que se basa Santa Claus es San Nicolás de Myra, un obispo del siglo IV en Asia Menor (actual Turquía). Se lo representaba vistiendo túnicas de obispo, generalmente de color verde, marrón, blanco o dorado, según los estilos litúrgicos de la época.
- Siglo XIX: En las primeras representaciones de Santa Claus en el siglo XIX en Estados Unidos, especialmente tras el poema «A Visit from St. Nicholas» (conocido como «The Night Before Christmas», 1823), Santa se mostraba con un traje variado que podía ser de color marrón, verde, azul o rojo. Estos trajes eran largos y recordaban a las vestiduras tradicionales.
- Thomas Nast: El caricaturista estadounidense Thomas Nast jugó un papel importante en definir la imagen moderna de Santa Claus durante la década de 1860. Nast lo representó con un traje rojo o marrón y con una amplia barba blanca. Sin embargo, sus ilustraciones aún mostraban variaciones en el color del traje.
- La Estándarización del Rojo: En la década de 1930, una famosa campaña publicitaria de Coca-Cola consolidó el traje rojo con ribetes blancos que es característico hoy en día. Aunque Coca-Cola no inventó el traje rojo, sí contribuyó a popularizar y fijar esa imagen en la cultura popular.
Conclusión: El primer «traje» de Santa Claus fue más variado y vinculado a los atuendos de los obispos o trajes invernales, con colores como verde, marrón o rojo, y su representación evolucionó gradualmente hasta convertirse en el traje rojo y blanco contemporáneo.