Arturo Fournier, abogado y diplomático.
Algunas amistades me han llamado la atención, por la pasión que siento por la historia, y particularmente la referente a la IIª Guerra Mundial[1]; el asunto es que los años de dicha conflagración fueron sumamente intensos en todos los aspectos, especialmente los negativos, por los horrores cometidos por el nazismo; como los positivos: el avance científico técnico, la energía de tanta gente por defender a sus semejantes, la vehemencia y el sacrificio a favor de los oprimidos y perseguidos, la defensa de las diferentes patrias oprimidas, avasalladas y la comprensión de muchos políticos por fomentar la tolerancia para hacer alianza con ideas de diferente signo y con ideologías diferentes.
Hoy recordaré hechos sumamente graves, que llevaron a Alemania-Nación que produjo filosofía y música clásica excelsa -de alto valor- a la debacle, tanto por la persecución que ejerció el nazismo, como por el desinterés de algunos otros, quienes menospreciaron al líder Hitler, pensando que era intrascendente[2] o que no había que prestarle atención, porque no iba a hacer nada grave, pensando que podían manipularlo.
El 14 de octubre de 1933 Alemania abandonó la Conferencia de Desarme en Ginebra, Suiza, y una semana más tarde se salió de la Sociedad de las Naciones[3], pero no muchas personas le prestaron la atención debida, porque ese organismo no había funcionado con la eficiencia que el mundo hubiera querido.
Se envalentonaron ante la desidia pública, y usaron el apoyo fanático de muchos seguidores que actuaban en grupos violentos[4] para reprimir y silenciar a los opositores. Así, el 30 de junio de 1934 se llevó a cabo una grave purga, que luego fue calificada con el epíteto de “la noche de los cuchillos largos”, mediante la cual Hitler ordenó arrestar y ejecutar SIN JUICIO, a varios centenares de personas a las que él mismo tenía por opositores políticos. Ya antes había empezado una campaña de desprestigio y de ataque contra los Tribunales de Justicia y contra la institucionalidad del país, porque impedían el desarrollo de la Alemania nazi (suena familiar, ¿verdad?), pero en realidad lo que buscaba era la concentración total de su propio poder, sin oposición, SIN CONTROLES DE NINGÚN TIPO.
Winston Churchill fue de las primeras personas en denunciar las verdaderas intenciones de ese estilo de gobierno, al punto que, a pesar de haber sido un fuerte opositor del régimen socialista soviético, consideró que era extremadamente necesario promover un baluarte de seguridad colectiva, capaz de frenar a Hitler.
Aquí en Costa Rica, han sido criticados ácidamente varios partidos que han buscado acuerdos para frenar las arbitrariedades e ilegalidades del gobierno actual, usando términos despectivos y agreden a sus integrantes, tal y como se hizo en la Alemania nazi.
Churchill quien fue un visionario, nos advirtió -como lo han hecho muchos aquí en Costa Rica- que:
“Hay una nación que ha renunciado a todas sus libertades con el fin de incrementar su poder colectivo; hay una nación que, pese a todas sus fortalezas y virtudes, se encuentra amenazada por un grupo de hombres despiadados que predican UN EVANGELIO DE INTOLERANCIA … SIN ATENDER A NINGUNA RESTRICCIÓN JURÍDICA, A NINGÚN FRENO PARLAMENTARIO, NI A NINGÚN CONTRAPUNTO SURGIDO DE LA OPINIÓN PÚBLICA. “[5]
De modo que la historia nos enseña a correr el velo sobre algunas decisiones de algunos gobernantes, que amparadas o disfrazadas con el clamor de la gente o fundadas en el descontento popular, lo que buscan son otros derroteros que ponen en peligro la democracia y la libertad, fundados en la arbitrariedad, la demagogia y sin atacar ni resolver los verdaderos problemas de fondo, como la corrupción o la depredación del ambiente, por ejemplo el sonado caso que ha estado siendo denunciado recientemente, parangonando la obra “La loca de Gandoca”, de Ana Cristina Rossi.
«Debemos estar atentos y frenar el deterioro actual, mientras el mandatario esté todavía en » la noche de las lenguas largas » (hablando mal de sus opositores), y antes de que copie a Hitler, emulando la represión y el baño de sangre de » la noche de los cuchillos largos «.
[1] Desencadenada desde el 1º de setiembre de 1939 hasta el 2 de setiembre de 1945.
[2] Muchos lo llamaban despreciativamente “ese cabo”, por el bajo grado militar al que pudo acceder.
[3] Antecedente de la Organización de las Naciones Unidas, pionera de los intentos de la humanidad por resolver las diferencias por vía pacífica y con base en normas de Derecho Internacional.
[4] De las cuales hay un embrión en Costa Rica, según ha denunciado mi hermano Marco Vinicio Fournier, en su último artículo: “Las brigadas de choque chavista”.
[5] Frase citada en el libro: “Churchill La Biografía” en inglés: “Churchill, Walking with Destiny”, de Andrew Roberts, Serie Mayor, Crítica Barcelona, Editorial Planeta, 2020, tomada de la referencia: CS, vol. V, pp. 5434-5435. Destacados y mayúsculas no son del original.
Muy acertado y pertinente me parece el artículo de don Arturo Fournier. Saludos!!
Este señor presimiente ya está bastante adelantado con su plan de un golpe de estado -blando- (hasta ahora sin armas). Lentamente ha venido desprestigiando los otros poderes y en si la separación de poderes, la insitucionalidad, los ticos con corona -que al inicio lo apoyaron- si bien no todos lo siguen apoyando-. Respecto al uso de fuerzas de choque, desde el inicio de la última campaña recurren a milites de troles, quieres degradan la campaña siguiendo el vulgar y popular discurso utilizado por chaves. Hasta ahí la reciente historia de nuestro país ha siguiendo muy fielmente a la Alemania de hitler y con un discuso muy gobbeliano -repite la mentira tantas veces hasta que se convierta en verdad o todos la crean comp tal-. Mentira y Postmentira.
Lo más grave en lo que el golpista que nos gobierna está es en eliminar -aunque sea con una corrupción descarada- cualquier disidencia política. Destrucción de la Contraloria para poder hacer las cosas libre de cualquier control, corrupción de la que de manera solapada ha venido montando en todo el corrupción.
Lo más reciente de la ruta hacia el golpe de Estado, ha sido -además del ejército de troles de chaves- el uso de “pescadores” contra estudiantes universitarios fácilmente reconocidos como matones a sueldo, hablando más hitlerianamente -las fuerzas de choque- de chavespectaculos. Hay que observar esta práctica ya que en caso de repetirse su uso y que la policía no haga nada por poner fin a estos excesos, que este potencial dictador ya está firmemente en camino a dar el Golpe de Estado. Lo que nos faltaba en Costa Rica, que un par extranjeros -cloacas de nuestra democracia- presimiente y la diputada cisnero s intenten dar un golpe de estado a una de las democracias más estables de América. Seguro estoy no lo lograrán consolidar, pero si les dejaran a nuestros hijos y nietos, un país lleno de odio, división, desprecio, irrespeto, machismo, misoginia, cualidades muy propios del analfabeta político que por desgracia nos gobierna.