Por Carlos Fernández Mora, escritor y periodista.
En los días en que se celebraba en San José de Costa Rica (1960) la Sexta Reunión de Consulta de Ministros de Relaciones Exteriores, para servir de órgano de consulta en aplicación del Tratado Interamericano de Asistencia Recíproca, el señor Presidente de la República, Licenciado don Mario Echandi Jiménez se encaminaba, acompañado de su apreciable señora esposa hacia el Teatro Nacional, lugar en donde se reunían los señores Cancilleres.
Al bajar de su automóvil que él personalmente guiaba, notó que los periodistas y fotógrafos, tanto nacionales como extranjeros, protestaban frente a las puertas de nuestro elegante coliseo por impedírseles la entrada a una sesión privada.
Al notar su presencia todos aquellos trabajadores de periódicos y revistas, se le acercaron al señor Presidente Echandi y le pidieron que interviniera con la Secretaría General a fin de que se les permitiese ingresar al teatro.
El señor Presidente, sereno, sin perder un solo momento su ecuanimidad y manteniendo desde luego su investidura de gobernante de Costa Rica, sonriente, les respondió:
—»¿No ven ustedes amigos que a mí tampoco me dejan entrar?».
Caricatura de Álvaro García López, GARLO.