Hoy, en nuestro acostumbrado tour por las ciudades y pueblos más bellos y fascinantes del planeta, iremos a Bangkok, si no tan bella, electrizante y muy rica culturalmente.
Como capital política, económica, cultural, gastronómica y espiritual de Tailandia, Bangkok cuenta tanto con el encanto clásico y cultural que se desprende en todo el país como con las comodidades modernas, a veces mostradas al viajero de una forma aparentemente caótica, pero siempre con esa sonrisa amable, seña de identidad de la hospitalidad tailandesa.
Su historia
Bangkok, capital del país de los Thai, fue fundada en 1782 por el rey Rama I. Antes de la fundación de la capital de Siam (como hasta el siglo XX se denominó a Tailandia), el pueblo Thai, originario del río Yunan y desplazado por los chinos hacia el sur, se había organizado a lo largo de su historia en tres reinos con sus respectivas capitales.
El primer reino tuvo su capital en Sukhothai, fue fundado en 1238 y perduró hasta 1350. Los Thai proclamaron su independencia de los Khmer y crearon el reino de Siam.
El segundo reino tuvo por capital a Ayutthaya y gobernó Siam desde 1350 a 1767. El reino de Ayutthaya fue fundado por el rey Ramathibodi I. Ayutthaya, cruzada por numerosos cauces de agua, llegó a ser bautizada como «la Venecia de Oriente», su nombre significa «ciudad impenetrable».
Después de años de luchas, el reino de Ayutthaya cayó en manos de los birmanos que la saquearon y destruyeron en el año 1767.
En el mismo año 1767, los tailandeses, con el rey Taksin el Grande al frente, expulsaron a los birmanos y trasladaron su capital a Thonburi naciendo un reino que se mantuvo por poco tiempo. En 1782 la capital se trasladó a la recién nacida Bangkok.
Cuando el general Chao Praya Chakri accedió al trono de Siam con el nombre de Rama I, temiendo una nueva invasión de los birmanos, mandó construir un palacio en la otra orilla del río Chao Phraya para que, en caso de que hubiera un nuevo ataque, pudieran huir fácilmente.
La denominación de Bangkok proviene de una pequeña aldea de pescadores cercana llamada Ban Kok «aldea de los olivos». Esta aldea existía desde mucho tiempo antes y era base de los comerciantes europeos camino de la antigua capital Ayutthaya y del sudeste asiático.
Bangkok es una ciudad recorrida por numerosos canales debido a que la ciudad se creó imitando la antigua capital Ayutthaya. Hoy en día muchos han sido eliminados para aumentar la red viaria.
Una peculiaridad tienen Tailandia y Bangkok, y es que nunca fueron colonizados por las potencias europeas.
Con un pujante turismo que ha favorecido su rápido crecimiento, Bangkok se ha convertido en una de las principales ciudades del sudeste asiático. Es sede de la Comisión Económica y Social para Asia y el Pacífico de las Naciones Unidas y de otras oficinas regionales de la ONU.
Desde ese día, Bangkok ha crecido y se ha desarrollado como una ciudad cosmopolita del siglo XXI, con más de 10 millones de habitantes.
Qué hacer en Bangkok
Templo Wat Arn
Entre las cosas que ver en Bangkok hay varios templos, y uno de los imprescindibles y más emblemáticos de la capital es el Wat Arun o Templo del Amanecer. Este está ubicado en la orilla del río Chao Phrayay es un templo budista que destaca por sus prangs (torres) decoradas con conchas marinas y trozos de porcelana, además de por las vistas magnificas que se tienen del río y de la ciudad desde lo alto de su gran torre central.
El prang central, el más alto (77 metros), simboliza al monte Meru de la cosmología hindú, mientras que los demás están dedicados al dios del viento, Phra Phai. En la entrada también te llamarán la atención dos grandes demonios del Ramayana. Una es de color blanco (Sahassateja) y otra de color verde (Tasakanth).
Desde la orilla opuesta, en la que se encuentra el Gran Palacio, o desde algún barco se tendrá una bonita imagen del templo con el río Chao Phraya mientras atardece. Para evitar el tráfico, lo mejor es ir en barco público. Tienes varias paradas desde la orilla oriental del río, costando apenas 30 THB el billete. La más cercana es la de Tah Tian, cercana al Wat Po, otro de los básicos que visitar en Bangkok.
El Wat Po, con su Gran Buda Reclinado de 46 metros de largo y 15 de alto, es el templo favorito en esa ciudad. Conocida por ser una de las estatuas más veneradas de la ciudad, ocupa casi todo el recinto y está recubierta de pan de oro, cuando la visites te recomendamos prestar especial atención a la decoración de las suelas de los pies, decoradas con 108 símbolos. Es una de las visiones que estamos seguros, no olvidarás de la ciudad.
Se trata de un templo del siglo XVII, lo que se traduce en que fue construido bastante antes de que la capital de Tailandia se estableciese en Bangkok. Posteriormente, en 1788, el rey Rama I pidió que se ampliase, para lo cual fueron llevadas estatuas y otros vestigios de Ayutthaya, la antigua capital. El templo ha sido modificado en varias ocasiones, pero fue durante el reinado de Rama III (1824-1851), cuando se incluyó la imagen del Buda Reclinado. Si tienes algo de tiempo, es conveniente saber que en la parte posterior de la estatua puedes hacer la ceremonia de limosna, una de las tradiciones budistas.
En el complejo también hay varios edificios (se cuentan más de 90 estupas) y estatuas de Buda de gran belleza. Además, te puedes realizar un masaje a un precio económico en la Escuela de Medicina Tradicional Tailandesa y Escuela de Masajes, que se ubica dentro de él y que se considera la primera universidad del país por lo que conviene ir con tiempo si tienes en mente realizar varias de estas actividades en el recinto.
Gran Palacio de Bangkok y el Templo del Buda de Esmeralda
Junto con Wat Arun y Wat Po, el Gran Palacio es otro de los básicos que visitar en Bangkok, incluso si dispones de solo un día. Este extenso complejo de edificios fue residencia oficial del rey de Tailandia desde el siglo XVIII hasta mediados del siglo XX y, a día de hoy, es uno de esos lugares que te aseguramos, no deja indiferente a ningún viajero.
El lugar más importante dentro del complejo es el Wat Phra Kaew, también considerado el templo budista más importante de Tailandia. En su interior se encuentra la estatua del Buda de Esmeralda, una pequeña figura de jade de unos 45 centímetros, que es el principal icono religioso del pueblo tailandés.
Además de este templo, en todo el recinto se podrán encontrar diferentes muestras de arte tailandés, decorando los distintos edificios que forman parte del conjunto arquitectónico.
Ubicado en pleno corazón de la ciudad, el Parque Lumphini cuenta con unas 56 hectáreas casi dominadas por un lago artificial que brindan un remanso de paz a sus vecinos. Este era propiedad privada del rey Rama VI, pero lo donó a la nación en 1925 para que fuese utilizado como recinto ferial y posteriormente fue convertido en parque, recibiendo el nombre del lugar de nacimiento de Buda en Nepal.
Si se visita a primera hora de las mañana, se opodrán observar grupos de tailandeses practicando deporte, bailando o, simplemente disfrutando de su tiempo libre. Además, el viajero se asombrará con la cantidad de lagartos gigantes que hay campando a sus anchas por Lumphini, muchos de ellos nadando en el lago.
La entrada es completamente gratuita y se puede aprovechar para dar un paseo luego por la zona de Silom, el distrito financiero de Bangkok, y curiosear en el Patpong Night Market, uno de los mercadillos más famosos de la ciudad, repleto de falsificaciones.
La Casa de Jim Thompson, hecha de madera de teca, es uno de los mejores ejemplos del estilo tradicional tailandés de arquitectura y, desde nuestra perspectiva, otro de los lugares que ver en Bangkok imprescindibles.
Construida en 1959 y formada por 6 casas de teca provenientes de Ayutthaya, construidas sin utilizar clavos, la casa de Jim Thomson, un empresario americano muy apreciado en el país por hacer famosa la seda tailandesa a nivel mundial, es el lugar perfecto para admirar gran cantidad artículos de decoración, pinturas y esculturas que son auténticas obras de arte.
En ella también podrás visitar su precioso jardín, en el que queda patente que Jim era un gran amante de la selva y creó su propio paraíso en mitad de Bangkok.
Khaosan Road
Una primera visita a la capital de Tailandia no estaría completa sin un paseo por su calle más mochilera. A pesar de que no es muy larga, Khaosan Road tiene fama mundial por ser el punto de partida de muchos viajeros que comienzan a explorar el Sudeste Asiático. Está repleta de hoteles y hostales, pero también de restaurantes y bares y es, por ello, que merece la pena ir al atardecer o por la noche. Es en este momento cuando hay más ambiente, se empiezan a llenar las terrazas y bares y se montan multitud de puestos callejeros de comida y bebida.
Mercado de Chatuchak
Si tienes en mente visitar Bangkok durante el fin de semana, no puedes dejar de ir a Chatuchak, uno de nuestros mercados favoritos y, con su alrededor de 15.000 puestos, el mercado más grande de todo Tailandia. Dependiendo de las ganas de compras que tengas o de lo que quieras curiosear, pasarás más o menos tiempo, pero ya te adelantamos que podrías pasarte un día completo recorriéndolo porque tiene absolutamente de todo, incluyendo restaurantes.
Aunque hay muchos puestos con precios ya fijados, sí que es bastante común regatear, aunque, como siempre, dentro de la coherencia y, sobre todo, sin llegar a hacer o pretender, que el vendedor pierda dinero.
Lo mejor es llegar a primera hora, ya que a medida que avanza el día puedes agobiarte por la gran cantidad de gente que acude diariamente. Se calcula que durante el fin de semana lo visitan alrededor de 200.000 personas.
Chatuchak se encuentra un poco alejado del centro, pero se puede llegar cómodamente en metro bajando en la estación de Chatuchak.
Si le gustan las antigüedades, justo delante se encuentra el Red Building Vintage Chatuchak. En caso de que necesites un poco de aire acondicionado para rebajar el calor, cuentas con dos centros comerciales justo al lado: el JJ Mall Chatuchak y el Mixt Chatuchak.
Río Chao Phraya
El río Chao Phraya es el más caudaloso y largo de Tailandia, además de partir en dos la ciudad de Bangkok. Además, en Bangkok crea una serie de canales secundarios llamados khlongs, que sirven en ciertas zonas para el riego de los arrozales, pero que en la ciudad conforman barrios muy curiosos.
Por eso, pensamos que unpaseo en barca de madera por los canales es una de las mejores experiencias que hacer en Bangkok. Durante el trayecto se podrá apreciar la forma vida y las casas flotantes de la orilla. Nosotros hemos cogido un par de veces una barca privada, con la que, además de navegar un rato por el río Chao Phraya, disfrutamos de la visión de los canales más estrechos y poco transitados. Dependiendo de por dónde vayas, también tienes la opción de ver el templo Wat Paknam, con una espectacular estatua de Buda de 60 metros de altura.
Aunque se encuentra a casi dos horas en bus de Bangkok, el mercado flotante de Damnoen Saduak es el más famoso y también turístico de la ciudad. Además de todo lo que ofrece, una de las cosas más llamativas es que este mercado lleno de color se recorre en una barca tradicional, desde la que puedes comprar todo tipo de productos: especias, frutas, artesanía o souvenirs, tanto en las tiendas de la orilla o directamente de otras barcas de vendedores ambulantes.
Este es el que casi todo el mundo visita porque abre todos los días, incluso de lunes a viernes, más o menos de 7h a 14h. Por esto, es recomendable llegar a primera hora para no verlo saturado de barcas. Si no quieres ir en bus puedes optar por el taxi, aunque si te decides por esta opción, lo mejor es fijar el precio antes para evitar sorpresas.
Mercado de Mae Klong
El mercado de Mae Klong es uno de los más sorprendentes del mundo al montarse encima de una vía de tren en funcionamiento. Cada vez que suena la bocina, el mercado se desmonta en unos pocos minutos y se monta otra vez después de pasar el tren, regalando esto una visión única del mercado y su funcionamiento.
Parece que el mercado ya estaba operativo antes de que llegara el tren al país. En 1905, cuando se construyó la vía, el mercado siguió operativo y hasta el día de hoy, que, a pesar de ser ya muy turístico, sigue siendo visitado por los propios tailandeses, que vienen a hacer sus compras de alimentación.
Se puede llegar en minivan desde la Estación de Autobuses de Mo Chit de Bangkok o desde la de Sai Tai Mai en una hora o dos, dependiendo siempre del tráfico. Otra opción es ir en tren desde la estación de Wongwien Yai hasta Maha Chai, luego cambiar a la estación de Ban Laem y coger otro tren a Mae Klong, pero considera que te llevará unas 3 horas.
Centro comerciales que visitar en Bangkok
Bangkok es una de las ciudades más populares del mundo para ir de compras en la que, además de los mercadillos, existen varios centros comerciales con todo tipo de tiendas.
Los centros comerciales más famosos que visitar en Bangkok son:
MBK Center: posiblemente el centro comercial más conocido de Tailandia. Inaugurado en el año 1985, con 8 plantas, alberga más de 2.500 tiendas y 150 restaurantes. Ya te adelantamos que, si te gustan las compras, aquí serás inmensamente feliz. En él destacan las tiendas de electrónica y de ropa y es importante saber que, aunque es un centro comercial, en la mayoría de tiendas se puede regatear.
Siam Paragon: situado cerca del MBK, este es el centro comercial con las tiendas de lujo y artículos de marca más caros de Bangkok. Además de tiendas de ropa, encontrarás concesionarios de coches como Maserati y Lamborghini o la ópera de Siam. Aunque no vayas a comprar nada, lo precios son fijos y no se regatea, merece la pena acercarse para ver sus espectaculares escaparates.
CentralwOrld: es el noveno centro comercial más grande del mundo. Sus 8 plantas, entre las que se incluye un hotel, están llenas de tiendas de electrónica, ropa y restaurantes y los precios están en un término medio entre el MBK y el Siam Paragon. Hay que tener en cuenta que aquí no se regatea, por lo que sí te gusta algo, deberás pagarlo.
Bangkok es una ciudad de contrastes, en la que es muy habitual ver cómo casas tradicionales pueden tener como vecinos impresionantes rascacielos. Estos altos edificios se han convertido en grandes miradores, que han sabido sacar partido, ubicando en sus terrazas bares y restaurantes, desde los que poder disfrutar de una vista única de la ciudad.
Miradores que visitar
MahaNakhon: inaugurado en 2016, se ha convertido en una de las atracciones imprescindibles de la ciudad, ya que está localizado en el segundo rascacielos más alto del país. Está ubicado en la planta 78, a 314 metros de altura, y, además de por la altura, el MahaNakhon Observatory impresiona por su suelo de cristal y vistas panorámicas de 360 grados de la ciudad. Además, el mirador tiene una arquitectura en forma de cajas de cristal produciendo un efecto pixelado que no deja indiferente a nadie.
Torre Baiyoke: es, después del MahaNakhon, el tercer edificio más alto de Tailandia. Durante una de nuestras visitas, aprovechamos un día para tomar algo y cenar en el buffet, donde disfrutamos de uno de los miradores que visitar en Bangkok más conocidos.
Este rascacielos tiene también uno de los hoteles más alto del Sudeste Asiático, el Baiyoke Sky Hotel, desde donde si se sube a su piso 84, se tendrá unas vistas panorámicas de 360 grados de toda la ciudad.
Sirocco: famoso por ser uno de los escenarios de la película Resacón en Tailandia, el restaurante Sirocco destaca por su espectacular terraza al aire libre situada encima del Lebua at State Tower Hotel. El restaurante tiene precios prohibitivos si vas a cenar, por lo que si no quieres dejarte la cartera, lo mejor es ir a tomar una copa en su famoso bar (a partir de 1.200 THB), aunque debes tener en cuenta que hay que ir bien vestido, ya que tienen código de etiqueta. El bar abre desde las 17h hasta la 00h.
Chinatown
Chinatown es uno de los barrios más caóticos y auténticos que todavía se mantienen en la ciudad y un básico que ver en Bangkok. Este barrio, cuya fundación data de 1782, siempre rebosa ambiente y vida, especialmente en sus dos calles principales: Charoen Krung y Yaowarat Road. Además, cambia radicalmente de día y de noche, por lo que es interesante visitarlo a diferentes horas del día.
Si se visita antes del anochecer se puede recorrer el bullicioso mercado de ropa de Sampeng (también conocido como Old Market, “Mercado Antiguo”) y visitar el bonito Wat Traimit o Templo del Buda de Oro y por la noche, enfocar la visita a los puestos callejeros de comida que se adueñan del barrio en ese momento del día.
Aunque puede ser un poco estresante por la cantidad de gente, merece la pena perderse unas horas por Chinatown y conocer este otro mundo que ver en Bangkok. Una buena opción para ahorrar tiempo y ver la ciudad desde otra perspectiva es reservar el autobús turístico de Bangkok.
Otro templo interesante que ver en Bangkok es el Wat Saket o Templo de la Montaña Dorada por estar ubicado en la cima de una montaña artificial, en representación del monte Meru. El edificio principal es una pagoda que contiene unas reliquias de Buda que fueron recibidas desde India.
Además de visitar este rincón religioso, subir los 318 escalones que hay hasta la cima (77 metros de altura), te garantiza una vista de 360ºde esta parte de Bangkok, que incluye el Gran Palacio. Considera que tendrás que llevar hombros y rodillas tapados.