María Isabel Solís Ramírez, periodista y salubrista, Revista Visión CR.
Pese a la trascendencia que tiene para el desarrollo económico, social y cultural de Costa Rica, la renovación de 50 kilómetros de la ruta 1, es decir el trecho conocido como Barranca-Limonal, especialistas en ingeniería, lamentaron la multitud de yerros que se han cometido en la ejecución de esta obra.
El tema fue foco de análisis durante la jornada técnica sobre la ampliación de esta ruta que se desarrolló recientemente, en la sede del Colegio Federado de Ingenieros y Arquitectos (CFIA) y cuya actividad fue organizada por este colegio profesional y por el de Periodistas y Profesionales en Ciencias de la Comunicación Colectiva de Costa Rica (COLPER).
El análisis estuvo a cargo de José Francisco Nicolás, diputado de la República; Olman Vargas, presidente del CFIA; José Manuel Sáenz de la Cámara Costarricense de la Construcción; Gerardo Acosta, del CFIA y Federico Baltodano de la Asociación de Carreteras y Caminos de Costa Rica.
Los panelistas destacaron la cadena de errores que se han cometido y que han atrasado la posibilidad de que los costarricense puedan tener una vía para transitar sin ningún obstáculo por la ruta 1, una de las arterias más importantes de Costa Rica.
Hubo consenso entre los expertos en que la falta de planificación, las improvisaciones, la escasa capacidad técnica, los vacíos legales… han dado al traste con el progreso de la obra.
Se trata de 50 kilómetros que se empezaron a construir en el 2020, pero cuyas obras fueron suspendidas en el 2023, cuando se suscribió el finiquito con la empresa contratada, tras alegar atrasos en la ejecución del proyecto. Esta ruta tiene un avance de aproximadamente un 20%.
Los panelistas también reconocieron que hubo problemas de diseño que ameritó un rediseño de la carretera y como consecuencia un retraso en la ejecución y aumento de los costos.
Calificaron tales errores como inaceptables lo que se produjo por una ausencia de supervisión por parte de la contraparte estatal y precisamente, una de las propuestas de los expertos, es mejorar todo el proceso de supervisión de la obra.
Otras de las dificultades que han contribuido al retraso del proyecto son los errores administrativos, la escasa capacidad técnica y Francisco Nicolás fue enfático en que los proyectos de inversión no pueden ser de cuatro años, sino que requieren tener un hilo conductor en las distintas administraciones para garantizar su continuidad.
Acciones que se deben corregir
El diputado por Puntarenas planteó la idea de crear un fondo de expropiaciones con la finalidad de que ningún proyecto sufra atrasos por la escasez de recursos para disponer de las propiedades cuando se inicien las obras.
El representante del CFIA dijo que se debe aprender de la experiencia y de los errores, pensar en el derecho de vía, los diseños deben ser muy bien analizados, pues no se pueden realizar a control remoto, adicionalmente pensar en los servicios públicos, las fuentes de materiales y escogerlas debidamente.
Hubo consenso entre los panelistas en la necesidad de tener claro los modelos de financiamiento, las fórmulas de reajuste, un muy buen esquema de supervisión de la obra que permita evitar errores de gran magnitud como ocurrió en esta vía Barranca Limonal.
Adicionalmente, se planteó la urgencia de contar con profesionales de gran experiencia en materia de planificación, diseño, materiales y ejecución de los proyectos y contar con la figura de un gerente con una gran capacidad para la toma de decisiones.
Otras de las propuestas de Federico Baltodano fue contar con un portafolio de inversiones públicas y ubicar cada proyecto en la realidad costarricense. También se recomendó la necesidad de ajustar los proyectos a los recursos económicos disponibles y de realizar una precalificación de obras y revisar las opciones financieras.
Se sugirió la revisión de los contratos de manera que incluyan todo: sus alcances, sus etapas, los derechos de vía, su diseño, la capacidad técnica, cronogramas de seguimiento y reconocieron que la paralización de las obras Barranca-Limonal le saldrá muy caras al país.
El Ing.Olman Vargas, presidente del CFIA, dijo que el colegio que representa está anuente a participar en cualquier proyecto tendiente a mejorar la obra pública del país y reconoció que se han ofrecido, pero lamentó que en ocasiones no ha habido receptividad.