Mario Rodríguez, abogado y comunicador.
Tremendas noticias en tan pocos días. Es tal y como se ha ilustrado en los principales diarios internacionales, como un huracán tipo 5. Trump no ha dejado indiferente a nadie.
En el año 2024, publiqué un artículo denominado ¿Es posible gobernar con procesos penales pendientes? (Revista Visión CR), en donde indiqué: “Si por la víspera se saca el día, queda claro que, hay que tener mucha madurez para gobernar/ o aspirar a dirigir las riendas de un país, pero aún más cuando, te encuentras enfrascado en procesos judiciales, pues, dentro del triunvirato estatal, es inconmensurablemente necesario guardar y mantener las buenas relaciones entre todos los poderes, pues, el Ejecutivo por medio de Hacienda, será el encargado de brindar los recursos indispensables para que el Judicial pueda operar, aunque ello implique el ejercicio de investigaciones en contra del propio gobernante, ahí está el quid del asunto”.
En el año 2024, publiqué un artículo denominado ¿Es posible gobernar con procesos penales pendientes? (Revista Visión CR), en donde indiqué: “Si por la víspera se saca el día, queda claro que, hay que tener mucha madurez para gobernar/ o aspirar a dirigir las riendas de un país, pero aún más cuando, te encuentras enfrascado en procesos judiciales, pues, dentro del triunvirato estatal, es inconmensurablemente necesario guardar y mantener las buenas relaciones entre todos los poderes, pues, el Ejecutivo por medio de Hacienda, será el encargado de brindar los recursos indispensables para que el Judicial pueda operar, aunque ello implique el ejercicio de investigaciones en contra del propio gobernante, ahí está el quid del asunto”.
Claramente, la referencia principal era Donald Trump, pues estaba enfrascado en una serie de procesos judiciales, de los cuales, por cierto, salió bien librado, y así pudo acceder a su segundo mandato presidencial, aunque convirtiéndose en el primer presidente con una sentencia en su contra (caso Stormy Daniels).
Lamentablemente, parece que, los pronósticos de los expertosse cumplieron, y esto se pudo prever desde que J. Biden otorgó indultos anticipados a su familia, y a personas con las cuales su sucesor había tenido serios encontronazos, como, por ejemplo, el Dr. Anthony Fauci.
Ya en el ejercicio del poder, Trump ordenó el despido de una docena de fiscales que lo habían investigado, por aparentemente instigar el asalto al Capitolio, según informó el Departamento de Justicia; además, indultó y conmutó penas a 1500 simpatizantes que participaron en dicho evento contra la democracia estadounidense. Ttambién, hace pocos días, despidió a los jueces de migración, y, está intentando echar de sus puestos a los oficiales del FBI encargados de sus casos, es decir, se trata de un aluvión de reacciones en contra de quienes desempeñaron funciones en los procesos.
Una de las claves de la democracia, no solo es contar con una clara división de funciones, sino con instituciones independientes, todo lo contrario, a lo que acaece en la Nicaragua de Ortega y Murillo, en donde un grupo de expertos de la ONU, afirmaron se asestó el golpe final al Estado de derecho, con la reciente reforma que les concedió “dominio absoluto”, a lo cual hay que adjuntar, el reciente juramento como policías encapuchados de miles de personas, a las órdenes del citado régimen. Aun recuerdo con tristeza, los comentarios de muchos costarricenses en redes sociales, aplaudiendo a Ortega y a su sistema de justicia, incluso, comparándolo con el nuestro.
Volviendo con Trump, ha sido criticado por los poderes concedidos a Musk, y su reacción en el primer consejo de gobierno fue respaldar a su consejero, afirmando que: “quien tenga problemas con Musk, se va”. No podía ser más claro, pero, ha encontrado reticencia a lo interno, pues ante la solicitud del sudafricano de exigir rendición de cuentas a los empleados del FBI y otras instituciones por medio de correo electrónico, los propios jefes han recomendado no contestar los formularios. Además, 60 relatores de la ONU denunciaron a EE. UU. por minar las libertades fundamentales, citándose las amenazas a Panamá, México, Gaza o Groenlandia; así como la decisión de retirarse del Acuerdo de París y de la OMS, y las amenazas de dictar sanciones contra la Corte Penal Internacional.
Parece que, el haber renombrado al golfo que los une con México es una nimiedad, en comparación con toda su política interna y externa, acentuando las presiones a su vecino del sur, al punto de que, el gobierno “azteca” extraditó a 29 personas de alto calibre en el mundo del crimen organizado, incluido, un viejo conocido de nuestro país, Rafael Caro Quintero, quien, en los años 80, puso de cabeza a la política costarricense. A este personaje se le conoce como” el Narco de narcos”, y ha sido objetivo del gobierno “gringo” desde que se le identificó como el artífice del secuestro, tortura y muerte del agente de la DEA “Kiki” Camarena.
Si usted es un apasionado de estos temas, podrá consultar innumerables documentales, libros, y hasta series de streaming, en donde se aborda toda la temática de Kiki Camarena y Caro Quintero, en donde se llega a relacionar a la propia CIA con la muerte del agente de la DEA, pues, este estaba indagando sobre la relación entre la Agencia de Inteligencia, los “Contras” de Nicaragua, el tráfico de drogas, y las revoluciones en América Latina, durante la guerra fría (https://www.publico.es/internacional/caso-camarena-oscuras-conexiones-narcos-cia-gobierno-mexicano.html). Ahora, con la entrega de Caro Quintero, quien será trasladado a la Corte en Nueva York, se cierra un ciclo, en el cual, al parecer, los fiscales estadounidenses están analizando solicitar la pena capital para el mexicano.
Para concluir, es indudable que, el presidente ha manejado su gobierno a las “Trumpadas”, presionando a la prensa, a los rivales políticos, al sistema de justicia que lo investigó, y hasta a sus propios socios comerciales, todo con el afán de obtener beneficios económicos, con la reducción de la burocracia, y la concesión de materias primas valiosas, como es el caso de los minerales raros de Ucrania, a cambio del apoyo en la guerra con la Rusia de Putin, aunque ello implique calificar a Zelenski de dictador, para luego olvidar lo dicho. Estos minerales, son esenciales para la industria militar estadounidense, para la fabricación de celulares y equipos médicos, por ende, parece que Trump se saldrá con la suya.
Tal y como ha sucedido con la presidenta Sheinbaum, quien, ante las presiones por los aranceles, ha participado en la cacería de uno de los hijos del “Chapo” Guzmán (Archivaldo), quien según medios de prensa se encuentra acorralado, sobre todo por la detención de sus principales colaboradores en días recientes. Además, al ser interpelada la mandataria sobre la extradición de los narcotraficantes, evitó pronunciarse, pero, en cambio, hizo referencia a la necesidad de ejecutar las nuevas reformas en torno a la elección popular de jueces y magistrados, calificando la corrupción en el PJ de aberrante y ofensiva, cuando más bien, innumerables organismos de derechos humanos han mostrado su preocupación en torno a los cambios que se vienen en el sistema judicial.
