Según última jornada técnica del CFIA y COLPER
María Isabel Solís Ramírez, periodista y salubrista, Revista Visión CR.
Cada época lluviosa los estragos producidos por inundaciones golpean con severidad a comunidades costarricenses de distintos cantones como Desamparados, San Carlos, Quepos, Moravia, San José…el colapso económico y social que las anegaciones producen a su paso es de grandes dimensiones.
El fenómeno fue analizado recientemente, durante una jornada técnica organizada por el Colegio Federado de Ingenieros y Arquitectos de Costa Rica (CFIA) y el Colegio de Periodistas y Profesionales en Ciencias de la Comunicación Colectiva (COLPER).
En esta ocasión, los profesionales participantes en la actividad propusieron una serie de acciones preventivas tendientes a reducir las consecuencias que generan el desbordamiento de los ríos y el colapso de la red pluvial que tiene Costa Rica.
Dentro de las principales recomendaciones planteadas por el grupo experto fue el establecimiento de una rectoría que dirija las diferentes acciones para enfrentar las inundaciones que suceden en diferentes puntos del territorio nacional.
En esta jornada técnica participaron el Ingeniero Rafael Murillo, quien efectuó el diagnóstico de la situación de las inundaciones en el territorio nacional, Huberth Méndez, de la Municipalidad de San José, Eladio Solano del Instituto Meteorológico Nacional (IMN), Rafael Oreamuno Vega, representante del CFIA, y Dyanne Marenco González, presidenta de la Cruz Roja.
De acuerdo con los expertos, son varias las entidades gubernamentales que participan en la prevención y en la atención de las emergencias producidas por las inundaciones, sin embargo, no existe coordinación que ordene los quehaceres y los conduzca hacia un plan integral que mitigue los efectos de los desbordamientos de los ríos.
Este trabajo, según los profesionales, implicaría adicionalmente, el mejoramiento urgente de los métodos de disposición de residuos sólidos, actualización de leyes, monitorear el cauce de los ríos, actualizar los planos de la red pluvial, nuevas reglas para urbanizar, reducir la pavimentación, diseñar soluciones basadas en la naturaleza, valorar la calidad de la escorrentía y hasta formar profesionales especializados en el abordaje integral del ciclo hídrico.
Las causas
El diagnóstico preparado por Rafael Murillo, con vasta experiencia en fenómenos hidrológicos, demostró que, en materia de inundaciones, el país tiene grandes debilidades que son las que propician y elevan el riesgo de las anegaciones.
Murillo destacó que, lamentablemente, las causas de las inundaciones son multifactoriales, entre ellas citó aquellas que tienen que ver con vacíos legales, desorden de conducción, otras relacionadas con el diseño de infraestructura, la urbanización, el aceleramiento de la escorrentía, la permisibilidad de los permisos de construcción, la pavimentación, la impermeabilización de los suelos, el cambio climático, la invasión que ha hecho el costarricense de la propiedad y la planicie que le pertenece al río…“Tenemos que vivir en armonía con el río”, sentenció.
Para el especialista, parte del problema es que se ha construido de espalda al río. El río tiene su cauce, el almacena y transita, pero lamentablemente, dijo, hemos cambiado la percepción de amigo a enemigo. Y se preguntó: ¿Vamos a seguir peleando con él o vamos trabajar en forma simbiótica con el río? A su juicio, no podemos seguir viendo a los ríos con hostilidad.
Los panelistas también sumaron otras dificultades que aumenta el riesgo de inundaciones en Costa Rica como la débil coordinación entre municipalidades, la escasa educación ambiental que tiene la población costarricense, el desorden existente en el manejo de residuos sólidos. Solo la Municipalidad de San José, según Méndez, recoge 143 toneladas de residuos al mes y se quejó de que la ciudad se ensucia muy rápido.
Los profesionales acotaron que existe una dilución de responsabilidades, pues son varias las entidades que participan entre ellas: la Comisión Nacional de Emergencia(CNE), el Instituto Costarricense de Acueductos y Alcantarillados ( AyA) el Ministerio de Ambiente y Energía( MINAE), las municipalidades, el Instituto Costarricense de Electricidad (ICE), el Instituto Meteorológico Nacional (IMN) las municipalidades y las ONG como la Cruz Roja y se preguntaron:¿Cuál entidad debe ser el ente rector?
Sobre este tema Dyanne Marenco González, presidenta de la Cruz Roja, hizo un llamado a la conciencia, pues destacó que, en el 2024, se han superado los incidentes de atención por inundaciones. Advirtió que es necesario una mejor gestión de los residuos sólidos y consideró la urgencia de la realización de campañas intensivas de educación.
Entre tanto, Rafael Oreamuno Vega, del CFIA, dijo que es necesario que cada municipalidad haga un levantamiento de información sobre cómo está el alcantarillado pluvial, cuál es su capacidad de carga y eso es importante para tener un sistema de alerta temprana que permita actuar con mayor rapidez.
Unas de sus grandes preocupaciones es que hay municipalidades que no tienen plano de alcantarillado pluvial. Reconoció la necesidad de tomar decisiones basadas en la naturaleza.
