El Papiro
Fernando Fernández, Revista Visión CR.
El término «papiro» tiene su origen en el griego antiguo. Proviene de la palabra griega «πάπυρος (papyros)», que hace referencia a la planta Cyperus papyrus, utilizada para la fabricación de este material de escritura.
El papiro, un medio de escritura emblemático del mundo antiguo, conserva aún hoy en día tanto el encanto rústico de su origen como la flexibilidad y el ingenio que conlleva.
Su importancia histórica está profundamente arraigada en la diversidad de plantas de papiro del Antiguo Egipto que crecían a lo largo del Nilo, donde emergió como la personificación por excelencia del deseo humano de comunicar e inmortalizar pensamientos.
Derivado de la médula de la planta Cyperus papyrus, nativa de las exuberantes orillas, pantanos y charcas del río Nilo, el papiro fue un testimonio de la relación simbiótica entre el medio ambiente y el progreso tecnológico humano, permitiendo mayores posibilidades y oportunidades para difundir el conocimiento y preservarlo para mayor comodidad.
Literatura del antiguo Egipto:
La producción literaria en el Antiguo Egipto era abundante en diversas formas. Durante el Imperio Medio, se compuso una gran cantidad de literatura, como himnos, poemas, lamentaciones, enseñanzas y cuentos, para el placer y entretenimiento de la corte real.
El mundo literario del Antiguo Egipto abordó temas más controvertidos y polémicos, como la guerra y el suicidio, e irónicamente conserva y resuena con el mismo motivo en la literatura moderna. De igual manera, estos temas se reflejan en los relatos de la Epopeya de Gilgamesh: una conmovedora historia sobre la búsqueda de la inmortalidad por parte de los hombres. Esta obra unifica beatíficamente el pasado y el presente, donde los humanos apenas han cambiado en sus intereses y dilemas sobre la vida e incluso la muerte.
Un ejemplo de la literatura griega antigua que abordó temas controvertidos como la guerra es la obra «Lisístrata» de Aristófanes. Escrita en el 411 a. C. durante la Guerra del Peloponeso, la obra es una sátira cómica que aborda los devastadores resultados de la guerra y destaca el poder de la intervención femenina para lograr la paz. Irónicamente, nuestro continuo camino hacia la plena democracia y el reconocimiento de los derechos de las mujeres refleja un problema social persistente que ha perdurado mucho más tiempo del que imaginamos inicialmente.
Al igual que en el pasado, la gente luchó contra la discriminación, una lucha que persiste en muchos rincones del mundo. A lo largo de la historia, la humanidad se ha esforzado por abordar esta desigualdad, pero el camino está lejos de terminar.
El antiguo Egipto abarcaba funciones administrativas, informativas y legales en rollos de papiro, tanto privadas como públicas. Todo lo que el papiro ofrecía a escribas, escritores, políticos y personas letradas era de una relevancia notable para la época moderna, anunciando un cambio en el propósito de la escritura para la gestión económica esencial y el funcionamiento de las actividades cotidianas.
El papiro, venerado como un medio de escritura adecuado y práctico, facilitaba no solo el acto de escribir, sino también el transporte fluido y la amplia difusión del contenido escrito, lo que reflejaba una idoneidad única para los textos legales y administrativos de la época.
Un ejemplo notable del texto en papiro como fuente informativa, que sirve como uno de los primeros tratados médicos registrados, es el Papiro de Ebers. Este antiguo documento contiene una gran cantidad de recetas de medicamentos, tratamientos de enfermedades y un pasaje sobre el diagnóstico y los síntomas de diversas enfermedades; su propósito era remediar diversas dolencias, incluyendo tratamientos para afecciones como las mordeduras de cocodrilo.
El conocimiento es poder.
La capacidad de leer y escribir era una puerta de entrada para participar en el gobierno, el comercio, etc.
En el antiguo Egipto, el término «escriba» conllevaba un profundo sentido de reverencia, ya que la alfabetización era una característica predominante de los funcionarios de alta estima. Leer y escribir era un requisito previo para los puestos gubernamentales. Existían escuelas de escribas, dirigidas principalmente a los hijos de las élites que «querían garantizar su acceso a los círculos de poder».
Lamentablemente, la naturaleza de los escritos del Antiguo Egipto reside en que están compuestos predominantemente por la clase alta de la sociedad, y muy pocas personas de la clase baja tuvieron la oportunidad de ascender a la cima, lo que demuestra una grave falta de democracia.
La élite tenía el privilegio de perpetuar su linaje y mantener su estatus, mientras que los más humildes a menudo se encontraban en posiciones inmutables durante largos periodos (estratificación social).
La paleta estándar del escriba combinaba un soporte para pinceles de caña con huecos para pastillas de tinta roja y negra.
Origen del papiro
Mucho antes de Alejandro Magno, los antiguos egipcios utilizaban el papiro, fabricado a partir de los tallos de la planta, para escribir. Antes de la fundación de Alejandría en el 331 a. C., el papiro era un medio de escritura ampliamente utilizado en Egipto.
Atribuir la invención del papiro a un individuo específico simplificaría erróneamente el complejo proceso de su desarrollo en el Antiguo Egipto. Es más preciso atribuir la invención a la experimentación de los antiguos egipcios en sus avances tecnológicos.
Ventajas del papiro sobre otros medios de escritura
Las hojas de papiro resultantes permitían escribir con tinta y una pluma de caña. El papiro era un material de escritura versátil y práctico gracias a su durabilidad, flexibilidad y relativa facilidad de producción. Desempeñó un papel fundamental en la difusión del conocimiento, la cultura y la administración en las civilizaciones antiguas, convirtiéndolo en un artefacto vital de la historia de la humanidad.
Uso del papiro en textos judíos y cristianos:
El Nuevo Testamento y otras escrituras cristianas se copiaron en papiro en la era cristiana primitiva. Estos rollos de papiro son cruciales para comprender cómo la doctrina y las prácticas cristianas han evolucionado con el tiempo. Los Papiros Chester Beatty y los Papiros de Oxirrinco, que incluyen fragmentos de la literatura cristiana primitiva, son ejemplos notables.
Las comunidades judías también usaban papiro para crear copias de la Biblia hebrea, conocida popularmente como el Antiguo Testamento. Los Rollos del Mar Muerto, que ofrecen información invaluable sobre las costumbres, creencias y antecedentes históricos judíos primitivos, se encuentran entre los manuscritos de papiro utilizados en las escrituras judías.
Cómo se difundió el papiro en el mundo grecorromano
Egipto, como inventor y único productor del papiro, también ocupaba una posición estratégica como centro comercial en el Mediterráneo. Con el ir y venir de los comerciantes, el ventajoso papiro habría atraído la atención de los extranjeros y, por lo tanto, probablemente llegaría a diferentes regiones a través de las redes comerciales. Esto, a su vez, constituyó una forma de intercambio cultural, introduciendo el papiro y su utilidad al mundo grecorromano.
Cabe destacar que la Antigua Biblioteca de Alejandría se erigió como un centro neurálgico del conocimiento antiguo, un epicentro intelectual que albergaba un inmenso repositorio de obras literarias. Cuenta la leyenda que, cada vez que llegaba un barco con libros, diligentes escribas copiaban meticulosamente su contenido para enriquecer la colección de las sagradas salas de la biblioteca. Tanto griegos como romanos, fervientes admiradores y promotores de la literatura y la filosofía, reconocieron la importancia de esta institución.
El papel del papiro como herramienta de escritura superior no puede ser ignorado por los griegos y romanos. Su flexibilidad y durabilidad, junto con su facilidad de producción, lo convirtieron en un medio crucial para la transcripción y preservación de la palabra escrita. A través del papiro, se capturó y perpetuó la sabiduría acumulada de diversas civilizaciones, contribuyendo al florecimiento del discurso intelectual y al intercambio de ideas que definieron el panorama cultural del mundo entero. Muchos de los maravillosos cuentos y la literatura griega deben su pervivencia hasta nuestros días, según los hallazgos arqueológicos, al papiro.
Como escribió una vez Janice Kamrin, del Departamento de Arte Egipcio del Museo Metropolitano de Arte:
En la cosmología del antiguo Egipto, el mundo fue creado cuando el primer dios se alzó sobre un montículo que emergió de la oscuridad y el agua ilimitadas e indiferenciadas, un eco mítico del momento en que cada año la tierra comienza a resurgir de debajo de las aguas de la inundación anual. Por lo tanto, las marismas de papiro se consideraban regiones fértiles y fecundas que albergaban los gérmenes de la creación.
Este concepto de los «gérmenes de la creación» cobra profunda relevancia en el contexto de los materiales de escritura. Así como estas marismas albergaban el potencial de crecimiento y creación, los materiales de escritura sirven como vehículos para la preservación y difusión de la literatura, las narrativas y el conocimiento endémicos, lo cual también implica crecimiento y creación.
Y este sentimiento resuena incluso en la actualidad. Sin los medios para documentar y compartir ideas, el progreso de la humanidad se vería considerablemente obstaculizado y muchos logros quedarían imposibilitados de alcanzarse.
