Federico Paredes, analista agroambiental.
Desde la escuela aprendimos que el agua es un recurso natural que al principio creíamos que era inagotable, pero que, con el pasar de las décadas y los eventos mundiales, hemos llegado a la conclusión de que es un elemento agotable.
Los químicos y los hidrólogos se han encargado de darnos a conocer diferentes tipos de aguas, según sea su composición, su contenido de contaminantes y su origen o procedencia.
Por ejemplo, todos hemos escuchado el término agua destilada que no es otra cosa que agua purificada que ha sido sometida a un proceso de destilación para eliminar impurezas y minerales. Esta destilación implica hervir el agua y recoger el vapor que se condensa en un recipiente separado. Es mediante este proceso que se elimina la mayoría de los contaminantes y los minerales que se encuentran en el agua que llega por la cañería o del pozo.
Ahora ¿Cuál es la utilidad del agua destilada? Su aplicación va desde la elaboración de productos farmacéuticos y cosméticos, hasta la limpieza de equipos médicos y la preparación de alimentos. Igualmente se utiliza en la industria automotriz para llenar las baterías de ácido-plomo y en la industria de la fotografía para mezclar productos químicos.
Todos hemos usado en algún momento el agua oxigenada, conocida químicamente como peróxido de hidrogeno, que es un compuesto químico formado por dos átomos de hidrógeno y dos átomos de oxígeno. Es un líquido incoloro que se utiliza como desinfectante y blanqueador en el hogar. Igualmente tiene aplicaciones en los ambientes de la salud para limpiar heridas y en la industria de la belleza para aclarar el cabello. Además, es usada en la industria alimentaria como agente blanqueador para la harina y otros productos alimentarios.
Pero ¿cuál es la diferencia entre el agua destilada y el agua oxigenada?La principal diferencia es su composición química y su uso. El agua oxigenada está plenamente identificada como un desinfectante y blanqueador ampliamente utilizada en el hogar y en la industria, en tanto que el agua destilada es producto de un proceso de “destilación”: hervirla, evaporarla y condensarla.
Existen personas que se preguntan si es posible usar agua oxigenada en lugar del agua destilada. Tal decisión no se recomienda ya que el agua oxigenada es un desinfectante y blanqueador y no es adecuado para su uso en situaciones que requieren agua purificada, como la producción de alimentos y la elaboración de productos farmacéuticos. El agua oxigenada también puede ser corrosiva y dañar ciertos materiales que no sean aluminio ni acero inoxidable.
Otra pregunta que asoma en la cotidianeidad de las labores domésticas o comerciales es la de si es posible mezclar agua destilada con agua oxigenada. Esta fórmula tampoco se recomienda ya que la combinación de estos dos líquidos puede producir gas de oxígeno, que es inflamable y por lo tanto puede ser peligroso. Además, la combinación de agua oxigenada y agua destilada puede disminuir la efectividad del agua oxigenada como desinfectante y blanqueador. El agua destilada y el agua oxigenada son dos sustancias con propiedades químicas bien diferenciadas. Es importante usar cada uno de estos líquidos para su propósito original y no mezclarlos o sustituirlos el uno por el otro.
Existe un tipo de agua llamada agua bruta, también conocida como agua cruda, que se puede encontrar en reservas naturales donde no se han registrado alteraciones naturales o tratamientos antrópicos que puedan afectar su composición. De esta forma, este es el primero de los tipos de agua que llega a las centrales o plantas de tratamiento para poder convertirse en agua potable o aguapara el consumo humano.
Los análisis de laboratorio del agua bruta han determinado cuál es su composición. Este tipo de agua es rica en ácido húmico, minerales, oxígeno y sal. Igualmente, al encontrarse en medios naturales puede contener bacterias y pequeñas partículas de arcilla.
Dentro de esta clasificación delos diferentes tipos de agua seguramente la que mejor conocemos es la del agua potable, también conocida como agua apta para el consumo humano, ya que recibe un tratamiento especial que la convierte en un líquido libre de químicos y microrganismos que puedan afectar la salud de los seres humanos. En nuestro país, el agua potable es procesada por el Instituto Costarricense de Acueductos y Alcantarillado (ICAA) mediante su Laboratorio Nacional de Aguas.
Dependiendo del país, el agua de los grifos también puede ser apta para el consumo humano, sin embargo, es importante asegurarse de previo sobre el tratamiento que recibe el agua en la zona que se visita, ya que no todos los países ofrecen agua potable por esta vía.
Costa Rica ha gozado de fama al reconocerse su cobertura de casi en un 90% del país con agua previamente tratada.
El otro término de dominio popular es el de agua salada. Es en los océanos y mares que cubren la Tierra donde encontramos este tipo de agua; tal como su nombre lo indica, el agua de mar contiene un alto porcentaje de salinidad gracias al cloruro de sodio en su composición. Por esta razón tiene la capacidad de conducir electricidad.
En contraposición al agua salada, el agua dulce es aquella que se encuentra de forma natural en los ríos, lagos, humedales, cenotes, ríos subterráneos e incluso en los glaciares y en témpanos. A diferencia del agua salada, esta posee una muy baja concentración de sales.
El agua calcárea o agua dura está compuesta por altos niveles de minerales, como el magnesio y el calcio. La dureza del agua se mide de acuerdo con los tipos de carbonatos que la componen, distinguiéndose así dos subtipos de agua calcárea: de dureza temporal y de dureza permanente.
Se han dado casos de que este tipo de agua también puede llegar a nuestros hogares a través de la red de distribución, de ser así, es capaz de generar daños en los accesorios de nuestro baño o cocina, así como también en las tuberías y electrodomésticos. Lo anterior se debe a que la cal quedará adherida -como si fuera un tipo de sarro- a las paredes de los elementos mencionados y puede llegar a generar averías.
En el otro extremo al agua dura, el agua blanda contiene mínimas cantidades de sal en su composición. El agua blanda es, desde el punto de vista químico, la que llega a la superficie gracias a la precipitación, por lo tanto, estamos en contacto con ella cada vez que llueve.
Normalmente este es el tipo de agua que se utiliza en las centrales hidroeléctricas incluso en las plantas donde se produce energía nuclear. Asimismo, muchas calderas utilizan este recurso para poder funcionar.
Otro término muy conocido es el de aguas negras, que no es otra cosa que algunos tipos de agua que ya fueron usadas en los servicios sanitarios y, por lo tanto, se encuentran contaminadas con heces y orina.
Ahora bien, a diferencia de las aguas negras, las aguas grises se pueden reutilizar. El agua que corre por las tuberías de nuestro hogar después de lavar ropa o utensilios de cocina se puede reutilizar para, por ejemplo, regarnuestros jardines y cultivos, lavar pisos de cemento e inclusive bañar mascotas.
Para concluir, tenemos las aguas residuales, que son las que eliminamos por las alcantarillas de las ciudades, a donde llegan desde las tuberías que tenemos en nuestras casas, oficinas, locales comerciales o industrias. Las aguas residuales son aguas usadas, por lo tanto, deben ser procesadas en plantas de tratamiento de aguas residuales para poder depurarlas y verterlas adecuadamente.
Este recurso tenemos que valorarlo cada vez más y tomar conciencia de que definitivamente es un elemento agotable. Así que, cada vez debe ser menos aplicado el refrán popular de que “agua que no has de beber, déjala correr” y sí buscar las alternativas de reutilización o de ulterior aplicación.